Eduardo Goligorski, ha escrito un artículo en libertad digital, que sin ser tan corpóreo como es la realidad, toca magistralmente puntos muy calientes de la entelequia de Cataluña. se empeñan estos nacionalistas ilusos en hacer que Cataluña no sea España, y esa identidad y situación o no hay quien la mueva. España es Cataluña, y Cataluña es España.
El independentismo siempre primará sobre los intereses y la realidad, hasta que por fin estalle la “burbuja”, y termine como lo acabó el general Batet en unas horas. si se llevan a cabo todas las tonterías de estos elementos, habrá que intervenir con la fuerza, y padecerá el noble pueblo catalán en sus carnes, los extravíos de tantos estúpidos que no saben lo que dicen ni lo que proponen.
Seguro de que si se encontrase oro, petróleo, o alguna fuente de riqueza inesperada en Murcia, etc., el discurso de estas personas se derrumbaría como se ha derrumbado la victoria a un punto, del referéndum sobre la secesión del “parti québécois" en Canadá. No se puede tapar el sol con un dedo. Están bien, y tranquilos como están ¿a que vienen estas aventuras, que solo traen odios rencores y guerra?
La gente quiere libertad, prosperidad, y ganarse el pan con sosiego, sin necesidad de estar todos los días viendo ese tejemaneje de los que solo quieren, como otros antes, sustituir a los que actualmente gobiernan una nación como es España. por mayoría absoluta o por convenios democráticos.
Ya se han dado mil y una explicaciones sobre la inviabilidad del proyecto secesionista. Si en los estados unidos de América hubiera triunfado la secesión, otro gallo cantaría para ese país, y no se sabe en que habría parado “el sur” esclavista con la victoria de los sureños confederados.
Afortunadamente, la guerra civil americana fue el triunfo de la libertad y de la prosperidad de que gozan actualmente los EE.UU., y la libertad de que gozan hoy muchos países, al amparo de las doctrinas de libertad de este país y de la fuerza de su unión.
No hay mayoría notoria, y por tanto no hay caso en estos dos territorios secesionistas en España. A mis años tal vez no vea los destrozos que estas cosas traerán. ya ahora tenemos bastantes, aunque sin muertos. Mi gente puede vivir en otro lugar más pacífico, y más inteligente y cívico. Los que ahora viven, tanto en el resto de España, como en las regiones secesionistas, lo verán para su mal.
Si actualmente las cosas están así en estas dos regiones ¿qué será en el futuro para los que no piensen como ellos? Si ahora ya no hay libertad ¿cómo podemos esperar que la haya, cuando estos señorones, amparados por lo más necio o bajo de la sociedad catalana, campen por sus respetos.
Una verdadera tiranía, que ahora es atemperada todavía por el voto de los que quieren seguir, como es natural, en España. Y no es que sean españolistas, es que son españoles para su bien o su mal. Como todos. Que los dirigentes de Cataluña y el País Vasco, quieran lo mejor para sus ciudadanos es una cosa. Llevarles a la catástrofe, es otra muy distinta. ¡Al tiempo
HAY TONTOS QUE TONTOS NACEN
ResponderEliminarHAY TONTOS QUE TONTOS SON
Y HAY TONTOS QUE HACER TONTOS QUIEREN
A LOS QUE TONTOS NO SON.