Hay cosas para mondarse de risa o de llanto, porque las dos cosas son posibles cuando oye uno a la gente y sobre todo a los políticos, hablar tonterías y machacando sobre lo machacado con opiniones muy sofisticadas, y actitudes demagógicas al extremo. Y de los comentaristas de los foros y las tertulias, ni les hablo.
Pienso que todos queremos que las cosas vayan bien (no sé algunos políticos), pero es que ya la cosa se pone incandescente cuando veo a un diputado en la TV , en el Parlamento, o en la prensa, decir las bobadas que dicen, solo para atacar al bando adversario sin tener en cuenta adonde nos lleva esa división y esa estupidez a todo el país.
¡Hay que salvar la enseñanza, dicen los que la han destrozado! ¡No permitiremos que la sanidad se desvirtúe, dicen los que la han dejado hecha unos zorros! No a los recortes, dicen los mismos que han callado sabiendo por los medios de comunicación, lo que antes sucedía.
¡Hay que ir contra los bancos, claman los mismos que se aterran de que sus ahorros se pierdan si los bancos quiebran! Y así un largo rosario de memeces, mientras que aun no se cumplen los límites de déficit, y que aun no sabemos el volumen exacto de tal déficit.
Los datos se dan por buenos por la oposición, cuando ellos mismos saben que no es así. Y en lugar de aceptar que las cosas van así, y de que ellos son los causantes de esta situación, claman por que el gobierno les llame para cooperar (naturalmente con sus peculiares matizaciones), cuando ellos deberían patrióticamente ofrecerse, para ni más ni menos ser parte de la solución del problema.
Otro tira su primera piedra contra un diputado colega de distinta ideología, que tal vez lo merecía, y al poco tiempo es él quien se ve metido en juzgados por asuntos de corrupción, de los que nos sé como se han concluido. Y ante esta situación, todos claman contra los recortes cuando de lo que se trata es de ajustar el nivel de gasto (la norma de la vieja). No gastar más de lo que se ingresa.
No veo que esto tenga solución, y tal vez se quiera salvar el amor propio, y los… llamémoslos desajustes, anteriores tapándolos de la forma que sea. Tenemos montones de ejemplos para abundar, pero aunque tuviéramos todas las evidencias, no íbamos a convencer a nadie.
Tratar de hablar con paredes blindadas es bobada, y como dice la Biblia : Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, Para que no seas tú también como él. (Proverbios 26:4)
la mayoria de los politicos que ejercen hoy no saben ni lo que dicen, son zombies mentales o de estructura de partido de los que hicieron la transición y sus compinches... No tienen vergüenza ni la tendrán, pues entonces denunciarian la miseria de sus jefes y sus progenitores sociales, viviendo eso sí todos del cuento muy bien a base de estafar a la mayoria... Mentiras y pactos secretos dijo Dorothy Day.
ResponderEliminarAsí como lo dices Alex creo yo también
EliminarEsto no se regenera ni queriendo