miércoles, 26 de diciembre de 2012

MÁS SOBRE LO MISMO



 

Estamos contemplando una situación que no se da en muchos años. Se trata de la independencia de Cataluña, segregada de España como si por arte de birlibirloque se pudiera hacer algo semejante y menos en estos tiempos, en que se busca la unidad y la utilización mutua para mejorar.

Leo los comentarios de la gente en los artículos que se escriben sobre esta materia, y se me ponen los pelos de punta cuando veo con que sinrazón suicida piensan desgajar una parte importante del territorio nacional, como si el rey pudiera dejar que cada cual tire por donde quiera, como si de una juerga de borrachines se tratara.

No creo que llegue la sangre al río, pero si me malicio que por las buenas estos tipos no van a querer hacer las cosas bien y que tratarán de alarmar un máximo, para después poder negociar algo más provechoso para ellos. Se entiende la clase política que, en toda España y de hecho en todos los lugares, se luce con las acrobacias políticas más absurdas.

De momento, los ciudadanos de toda España se han visto arrebatados por el vendaval en que nos tienen envueltos los “progres” por un lado, y los mas cavernarios por otro. Como si el bien hacer, la decencia, la honradez, el respeto y tantas buenas cosas como nos ha traído el cristianismo fueran algo a extirpar, y dejar a las patrañas nuevas que se posesiones del alma de los españoles, sobre todo de los niños.

La religión es perseguida, criticada, objeto de burlas, etc. Las cosas que pasan en todos los lugares de esta tierra nuestra, son más puestas bajo la lupa si se trata de la Iglesia Cristiana. No van en contra de ella, sino en contra del mismo Cristo que nos dijo muy claramente: El que a vosotros oye, a mí me oye; y el que a vosotros desecha, a mí me desecha; y el que me desecha a mí, desecha al que me envió. (Lucas 10:16).

En los lugares más evolucionados socialmente priva la corrupción más desatada, como en los de menos progreso. El progreso material, siendo que el hombre ha de ejercer dominio sobre la tierra, se ha convertido en el peor de los libertinajes y el ser humano está prendido en estas redes mortales. Tal como los hebreos en el Sinaí.

Creo que no me equivoco si digo la famosa frase de Cicerón; Delenda est Cataluña. De la forma en que marchan veremos movilizaciones militares, y muchas más cosas que no gustarán a los que las vean. Tirar tanto de la cuerda es romperla, y cuando se empieza el queso lo demás viene solo.

En este caso, y disculpen los más sabidos, puedo hacer la predicción de que no se acabará sin sangre y sin muchas penalidades para todos. El caprichito de ser independientes alegando pamplinas, y perjudicando a los demás españoles que tienen tanto derecho como los que viven allí, va a costar mucho a España, aunque no creo que se deje que una parte tan importante de nuestro territorio sea desgajado como si fuese el gajo de una naranjita. Nous verrons déjà. 

domingo, 23 de diciembre de 2012

SE HA PERDIDO LA CULTURA DEL SACRIFICIO


 
Autor.- Camilo Mudarra  


La crisis que nos atenaza no es sólo económica, es también social y política. La moral o la ética, en griego, es una disciplina eminentemente social y política, dice Aristóteles. Esta sociedad está moralmente enferma; ha perdido sus valores esenciales y sus convicciones tradicionales y se ha dejado caer en el hedonismo y en el relativismo. Ha renunciado a la cultura del sacrificio, del esfuerzo, de la lucha por una idea, por el trabajo feliz de cada día basado en la bondad y la honradez, a fin de prosperar. Veamos dos principales regiones españolas.


Cataluña hoy no es la que fue, aquella región que sabía del esfuerzo, tesón, sacrificio como medio para alcanzar el propósito propuesto. “El elegido –dice S. Sostres- luchaba con ahínco para llegar a donde se proponía; la grandeza se consigue con generosidad; un hijo amoroso con sus padres es metáfora de la solución universal y la ingratitud es un cáncer. Cataluña supone la capacidad de sacrificio; creció y ganó con ese bagaje, fue imbatible con ese espíritu, con esa fuerza, con la dureza del trabajo.

Sin embargo, ahora, ya hace tiempo que parece haberlo olvidado y hoy aquí se grita más que se trabaja, se oyen más quejas que proyectos, más manifestaciones que dedicación a perseguir los sueños, la sociedad se ha reblandecido, debilitado, se debate fatigada en la autoindulgencia y en el conformismo, se buscan culpables y explicaciones fuera de sí mismo.

La plenitud no está en hablar ni en protestar, ni en quejarse de las injusticias con las que se convive; sólo con el duro trabajo y en el sacrificio se halla la excelencia”. El triunfo se consigue con el empeño; se tiene que perseguir y concentrarse en sobresalir, en ser el mejor en lo que haces, en ser apasionadamente excelente, generosamente entregado, orgullosamente el más profesional.

Andalucía, por su parte, ha trabajado esforzadamente, ha reído y llorado, cantado y rezado, sufrido y soportado. El reparto social siempre ha respondido a la dualidad: por un lado los obreros y las clases medias y, por otro, los ricos, los poderosos; pero siempre con una gente sometida al cacique del terruño; ello ha sido su pasado y sigue siendo su presente.

Así, a ese tenor, desde que se instaló la autonomía, el socialismo ha copado la región como su propio “cortijo” y ha asentado su tesis del miedo a la derecha, mediante el hábil manejo de los medios de comunicación en su poder e inculcado que sólo votando socialismo se tendría democracia, prestaciones sociales y el estado de bienestar; todo lo demás sería franquismo, tiranía, sometimiento y malestar.

Véase cómo, en las últimas elecciones andaluzas, ganó Arenas, pero inmediatamente, al amparo de una Ley Electoral defectuosa y falta necesariamente de su reforma, hicieron su componenda y ahí está gobernando otra vez, el PSOE e increíblemente con IU, que de otra forma jamás hubiera llegado a detentar el poder.

Los socialistas han hecho de Andalucía su sayo a medida; ahí están los ERES y todo lo publicado sobre irregularidades, a lo que replican que ellos “no sabían nada, que se enteraron por la prensa”; entonces, ¿qué hacían, quien gobernaba?

La educación la tienen por los suelos, los alumnos andaluces son los peor preparados de España y Europa por su ignorancia y fracaso escolar a causa de la malsana LOGSE; el paro supera la media nacional, así como las familias que están en la pobreza, lo que la propia JUNTA ha reconocido: “Es inasumible”.  Los jóvenes menores de 24 años en paro alcanzan el 52,3%. La OIT denuncia que la crisis y el paro se ceban en el campo y en el Sur de España; encontrar trabajo con más de 45 años es misión imposible.

En fin, que las autonomías no han sido la solución, sino más bien un perjuicio. La existencia del Gobierno de la JUNTA no ha reportado mayor beneficio al interés general y al bien común; esta y todas suponen un gasto enorme y un despilfarro que supera las posibilidades de la Nación.

C. Mudarra

martes, 18 de diciembre de 2012

CORRUPCIÓN "GENERAL"




No deseo volver a los tópicos, necesariamente dolorosos para todos y sobre todo para los “ejecutados” y echados de sus viviendas, y del trafico ilegal e ilegítimo de dinero huyendo de España para engrosar las gruesas cuentas de los evasores ladrones. Es la corrupción llevada a sus más repugnantes términos públicos. Ya no queda sino restaurar la esclavitud, o enseñar a la gente a que no coma, y se allane a que comer poquito y basto es lo aconsejable para la buena salud.

Esta clase de corrupción es consecuencia de otras corrupciones mayores y por supuesto de la mayor de todas. El silencio culpable de los que por temor, todo lo legítimo que se quiera, entran en esa espiral de fango y putrefacción del país.

Es natural que si te amenazan de alguna manera, y desde el Estado se puede amenazar muy duramente, te eches atrás o te conformes con lo que te digan. Así hemos visto escándalos monumentales y “no passa nada”. Y no pasa, porque las personas responsables, amenazadas más o menos expresamente, se introducen también en el reino de la mentira y la tergiversación.

Solo al ciudadano normal se le aplica la justicia con más rigor, para dar sensación de que las cosas están duras para todos. No es verdad, porque los grandes se escapan de una manera sutil, y los ciudadanos normales sufren en sus propias carnes el peso de la corrupción.

Tenemos montones de casos de corrupción clara y simple. Las cosas se embarran y se amontonan, de forma que un caso de corrupción se enlaza con otro de tal manera, que no hay por donde deshacer la madeja que se ha formado entre unos y otros. “Perro no come perro”. Esa es a mi juicio la situación. “El que puede levanta peso”.

Y se lanzan todos como un solo hombre a sacar las lacras de la Iglesia cristiana (En España la Católica), con el fin de esparcir una nube de humo sobre las demás lacras que sumen en la ruina y la desesperación a muchas personas que, de ciudadanos normales, se tornan todos en infractores de la ley, y al que la guarda y la respeta le llaman tonto.

Aquí viene a cuento lo que decía el gaucho Martín Fierro con su peculiar lenguaje:

La ley es tela de araña,  
en mi ignorancia lo explico,
no la tema el hombre rico,
y no la tema el que mande,
pues la rompe el bicho grande
y sólo enrieda a los chicos.

Es la ley como la lluvia,
nunca puede ser pareja,
el que la aguanta se queja,
más el asunto es sencillo,
la ley es como el cuchillo,
no ofiende a quien lo maneja.

Le suelen llamar espada
y el nombre le sienta bien,
los que la manejan ven
en dónde han de dar el tajo,
le cae a quién se halle abajo,
y corta sin ver a quién.

Hay muchos que son doctores,
y de su ciencia no dudo,
mas yo que soy hombre rudo,
y aunque de esto poco entiendo
diariamente estoy viendo
que aplican la del embudo.

José Hernandez   (Martín Fierro)

lunes, 17 de diciembre de 2012

¡AY DE EUROPA!



No tengo el más mínimo deseo, de hacer apología de ninguna confesión cristiana ante otras diferentes. No es mi rollo, ni soy llamado a juzgar. Soy hombre de fe, y nada más. Solo veo lo que me parece de razón y que, por decirlo, atrae sobre mi persona la inquina de los que ven por un solo ojo y dejan el resto de la realidad apagado y en la ignorancia. Como el que se pone en cada ojo un euro y no ve nada más que dos euros.

En realidad me pongo el gorro de cada cual, y trato de comprender lo mismo al que se dice ateo, que al que se dice muy religioso. Difícilmente se encontrarán más «dioses» que los que tenía el panteón griego, después aumentado por el romano que añadía dioses de los países conquistados por el imperio. Por eso a los cristianos que creían y adoraban a un solo Dios les llamaban ateos.

Europa rebosa soberbia, y hace necia ostentación de una capacidad de legislar contra natura que es sorprendente; en Viena se ha celebrado una conferencia para criticar y menoscabar la fe cristiana, en nombre de la dichosa igualdad, que por mucho que se legisla, no se ve por ningún lado. Y aquí no entro, como digo, en apologías ni discusiones.

Me da pena, porque la cristiandad fue la que salvó a Viena del dominio turco ¿Cómo sería hoy Viena sin aquella defensa? Todo eran loas porque realmente, La Iglesia fue adelantada para detener la marea turca cuando el peligro era ya casi irreversible. Ya en tiempos de la batalla de Lepanto, ganada por otra coalición cristiana, se detuvo lo que al fin y al cabo era el sometimiento de las naciones cristianas al yugo islámico.

Otro nuevo intento de islamización se produjo y puso en definitivo peligro a Europa, desamparada por Luís XIV rey de Francia; Europa Central ya había sido mordida por la furia guerrera de los turcos. Rusia, Ucrania, Hungría que lindaban con aquel temible imperio, habían perdido territorios que después de la batalla de Kahlenberg volvieron a recuperar.

En definitiva, Viena debe su altura cultural y su fama mundial actual, a una coalición de príncipes de distintas culturas que tenían como factor común pertenecer a la cristiandad. Tan pronto como el triunfo fue definitivo se rezó un Te Deum en la catedral de Viena. ¿Es que ahora, jactándose de ser de los más civilizados, no les da vergüenza dar de lado a la «ideología» que les salvó del vasallaje y la incultura?

Por eso me avergüenzo de lo que quieren hacer, y más por ellos mismos, que son la quintaesencia de la cultura, el arte, y la paz. Ellos mismos están desmantelando la cultura cristiana, raíz de la paz que gozan, en nombre de una supuesta igualdad. La igualdad no es café para todos, pues todos no gustan del café, sino lo que sea adecuado y conveniente para cada uno.

Aquí viene al caso el poemilla de A. Machado

El bueno es el que guarda
Cual venta del camino,
Para el sediento el agua,
Para el borracho el vino.

La Cultura Cristiana es mayoritaria en esos países y como tal (no hace falta que lo pretenda), tiene por sus mismas gentes seguidoras, un poder sobre multitudes de ciudadanos a los que se quieren privar y disminuir los derechos que tienen adquiridos, desde mucho antes de aquellas faustas y gloriosas jornadas del levantamiento del sitio de Viena.

El cristianismo de cualquier clase, (pues en este trabajo no estamos sustanciando quien es mejor) es la base de su cultura, aunque como a todos los demás, la prosperidad ha traído la soberbia, y esta, como dice La Escritura Santa, es antes de la caída. Cultura que ha hecho la libertad, la educación, y todos los elementos positivos de esta sociedad, perfectamente contrastables.

viernes, 14 de diciembre de 2012

LA VERDAD NO TIENE PRISA



Me divierten los comentarios, comentaristas y otros aficionados a la perfecta gobernación de España. Está bien que todos opinen, y no vamos a pedir que todos opinen igual porque cada cual proviene de unas raíces distintas, y sus experiencias, lecturas etc., influyen necesariamente en sus puntos de vista.

La libertad de ideas, hacen que en cada país se hable y proceda de manera distinta dependiendo del clima, la cultura y la forma de sentir las palabras de Jesús de Nazaret, el judío que revolucionó el mundo con solo el arma de la verdad.

Aun no he visto a nadie que le refute con fundamento, porque la solidaridad, la bondad, la justicia, etc. como ya he indicado en otros escritos es la auténtica verdad y eso lo reconocen todos y no cabe discusión.

Ahí está Israel dando clases de unión a pesar de ser una democracia, y unidos resisten las ofensivas declaradas de sus enemigos de alrededor. No entro en profecías, que las hay a miles. Los centenares de heresiarcas que han surgido a través de la historia, han hecho más sólido el mensaje evangélico, mostrando que la anarquía y la prepotencia solo llevan a la ruina.

El retorno de Israel a su tierra es un hecho, y nadie podía pensar hace casi dos mil años que un pueblo así, minúsculo, pobre, disperso por todo el mundo, pudiera subsistir, mientras que imperios y naciones enormes desaparecían de la escena mundial.

En todo muestran el genio de la raza, y cumplen sobradamente a lo largo de la historia con las profecías que de ellos se hicieron hace miles de años. Tal genio racial y religioso no se ha repetido nunca, y ahí está, proclamando que La Revelación es verídica, y que las palabras de Dios son realmente operantes.

Pueden caer más o menos simpáticos, pero solo acudiendo a los premios Nobel se nota quien es quien; los avatares políticos no hacen mella y antes que de los palestinos las tierras fueron de ellos. Y antes de ellos de otros y otros etc. Todos los países se han hecho así. Solo la paz es posible entre ellos porque la guerra ya ha costado bastante.

Del mismo modo, Jesús se reivindicó como ungido de Dios, y cumplió en su persona otras muchas profecías que han dado validez a millones de personas. Gentes que han pensado más en el espíritu, que en las mentiras que tantos urden para despojar de majestad el mensaje del nazareno.

Bendito sea por los siglos.

AMDG.

domingo, 9 de diciembre de 2012

TONTERÍAS SOBRE EL "CONFLICTO CATALÁN"



Como los españoles somos dados a decir tantas majaderías, es obvio que también necesitamos a los “amigables componedores” que nos echen una mano cuando esta majadería afecta a alguien. Y como también somos tan directos, generalmente hacemos una personalización de nuestra crítica en alguien de carne y hueso que “por consiguiente” se "cabrea" y arma la “marimorena”.

Por eso en España existe el que “echa una capote” sobre lo dicho, y aquí no ha pasado nada, sino que el afectado ya no aguanta más al que lo criticó, prescindiendo de que la crítica sea mas o menos cierta y justificada. Y a esta critica y a esta persona que dice estas majaderías se le llama “fascista”; en catalán “feixista”… y a vivir.

Ahora ha salido a la palestra la afirmación de un obispo que apoya la “inmersión lingüística” que significa “en catalán nacionalista”  que “aquí se habla lo que yo quiero y sanseacabó”. Siempre, eso sí, en catalán. Los protestantes saltan de alegría al conocer el “renuncio” del obispo, y pone a todos en las filas de los “traidores” porque no piensa el hombre como ellos. Habiendo y hay que decirlo tantos “traidores a una u otra causa entre los llamados protestantes.

Naturalmente que muchos amigos del “resto de España”, católicos de muchos colores, han puesto el grito en el cielo, y han dicho que ellos ya no se consideran católicos. Las redes sociales y los comentaristas de noticias dicen que “con razón decía yo, que esto del catolicismo era un montaje”. Y ahí queda la superficial opinión de los que antes eran católicos y ahora no lo son, porque un obispo opina extremadamente volcado hacia una de las tesis que se sostienen en este asunto.

Como es preceptivo, los comentaristas defienden a capa y espada sus distintas percepciones del fenómeno "nazi-catalanista", y la razón se pierde entre grandes sinrazones de unos y de otros. Porque unos no quieren, como en años anteriores, beber cava catalán, y otros dicen que se les está robando. Como se ve todo muy "meditado y objetivado".

En los supermercados a pesar de la fama del Vichy catalán, la gente dice claramente “que se lo beban ellos” y pasan a otros productos similares “fabricados en España”, como si lo catalán no fuera español. Y es que la lógica y la objetividad brillan por su ausencia en los debates sobre los asuntos nuestros y al final, casi siempre, se acaba diciéndole cabrón o desgraciado etc.  al oponente.

Y a falta de decisión de las autoridades “elegidas” por el pueblo, este se lanza cada uno por sus fueros a dignificar su causa a la manera española, es decir, insultando y amenazando. Seguro que así hayamos la solución al “conflicto catalán”. Sobre todo si interviene "el "razonable" amigo de ambos.

sábado, 24 de noviembre de 2012

LA PEDRADA EN EL OJO (POR ALBERTO BOUTELLIER)



Queridos amigos: Por si os apetece, os dejo el artículo que hoy cuelgo en Faceboock. Un abrazo. Alberto


Todos los días al despertar sintonizo la radio y me llevo instintivamente las manos a los ojos. Es un acto reflejo de mi subconsciente y parece que de esa forma me protejo de la nueva pedrada con que me amenazan  desde los poderes públicos.

Estoy convencido de que no hay que tocar lo que funciona, y también, de que hay que renovarse o morir. Como siempre en el término medio está la virtud, pero tras las medidas recientes del gobierno español, y no entro en condicionantes externos ni en herencias, está claro que lo menos que debemos exigir los gobernados, es que no se tomen decisiones a impulsos, y mucho menos, si éstas pueden desencadenar serios perjuicios.

Está claro que detrás de cada medida solo hay un objetivo económico y no se atiende en absoluto las repercusiones sociales y, en el más puro estilo Gaussiano, la campana se estrecha tanto, que en lugar de campana se transforma en un “pirulí” donde solo sobreviven, y cada vez mejor, las élites de la especulación y las atornilladas sanguijuelas políticas que viven de nuestras cada vez más exigüas economías.

Dos ejemplos: Bajo la apariencia de proteger nuestra integridad, se realiza una fuerte inversión en radares de carretera. Resultado: mayor recaudación, y la Guardia Civil que no actúa como figura disuasoria, sino como fantasmagórica imagen agazapada que aparece tras un seto para meternos la mano en la cartera.

El segundo ejemplo es de ayer: Se acabó la justicia gratuita. Antes existía una justicia para ricos y otra para pobres; me explico: el granuja que cometía un delito, si era rico, tenía una gran defensa y probablemente quedaba en situación de poder seguir campando. Podía promover tantas querellas como quisiera contra todo lo que se moviese. Ahora seguirá haciéndolo porque su dinero se lo permite.

El común de los ciudadanos, cada vez más pobres y los pobres pobrísimos, nos quedamos sin la posibilidad siquiera de solicitar un procedimiento monitorio. Resultado: mayor recaudación y mayor indefensión para el pobre propietario de un piso cuyo inquilino no le paga el alquiler, el autónomo al que no le abonan una factura de 300 euros, el injuriado que debe tragarse la injuria; ¿quién va a demandar a alguien porque le llamen “hijo de puta”? tendrá que convivir con ese estigma o rascarse el bolsillo para lavar su honor y su estirpe. ¿A quién satisface esta medida?

Por lo que percibo, ni a Jueces, funcionarios, abogados, procuradores, a nadie en el mundo de la justicia que se supone serían los beneficiados; solo a los señores ministros de Justicia y de Economía pasando por encima de los intereses generales de los ciudadanos. ¿No podían haberle dedicado unas horitas más a considerar las consecuencias?

Espero que como aún a la Hacienda pública no le ha dado tiempo a preparar los impresos -¡fíjense si van deprisa las decisiones!- a alguien que puede y debe, revise las consecuencias y no deje a la mayoría con el dolor de una nueva pedrada en el ojo.

martes, 20 de noviembre de 2012




Tomado de INTERECONOMÍA  7 DE MAYO 2010 


Un hombre muy poderoso

que vivía en un palacio,

rodeado por ministros

con abundantes salarios

que le reían las gracias

y celebraban su encanto,

se llamaba Zapatero

y estaba muy preocupado.




Tras años de gran bonanza

y de boom inmobiliario,

tras presumir por el mundo

de nuestro modelo patrio,

nuestra inflación, nuestro PIB

nuestra deuda con los bancos

nuestro cine, nuestro sol

nuestro fútbol estrellado

(porque cuando él gobernaba

llegó Cristiano Ronaldo

y ganamos la Eurocopa

después de pasar los cuartos

con paradón de Casillas,

sin Raúl González Blanco)

tras todo eso que menciono

(no sigo, que me atraganto)

Vinieron las vacas flacas

y con ellas, -¡al carajo!-

se fue la prosperidad,

la mariscada del sábado,

el pisito en Benidorm

y el Rolex pagado a plazos.




Así, la bolsa se hundió,

los inversores marcharon

adonde no les mintieran

ni dieran por liebre gato.



Y entonces surgió el rumor

el comentario infundado

que aunque no sea verdad,

del mismo modo hace daño.


"España está en quiebra, dicen,

pues Grecia la ha contagiado,

necesita otra inyección,

cuanto antes, de lo contrario

tememos su bancarrota

a corto o a medio plazo".



Al saber tal, ZP

furioso alzó las dos manos,

se rasgó las vestiduras

y entonces dijo clamando:

¡Soy ZP el justiciero!

El Atila de los Bancos

el Lenin de Wall Street

y de la Iglesia el Juliano.


¿Cómo se atreven los brokers

a intentar doblarme el brazo?

¡Necios especuladores,

fachas, bribones, marranos!

Oídme bien, sanguijuelas

y capitalistas varios:


España nunca se rinde


mientras yo mantenga el mando.


Saldremos de ésta unidos

si es preciso de la mano.

Ved, si no, cómo la ofrezo

a mi colega Mariano 

al que veré en La Moncloa

para preparar un pacto

sin meternos en recortes

ni reducir funcionarios.




Tras su anuncio vehemente

y taxativo alegato

sonó el teléfono, y era

la inconfundible Salgado.



¿Qué tal estás, Elenita?

-contestó Zapatero, ufano-


¿Me has visto en televisión

portándome como un bravo

y parándole los pies

a todos esos bastardos?




Sí lo he visto, presidente,

-dijo la vice del ramo

que llaman Economía-

Justo por eso te llamo:

Eres un crack, José Luis,

fulminante, como un rayo:

en cuanto has dejado de hablar

se han hundido los mercados.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Y DALE, CON LOS CATALANES





Leo en un periódico catalán, que por lo visto está acomplejado por el tema español, que no les da miedo perder los derechos a ser “no europeos” y que el número, aunque sea por una décima les da el derecho a los separatistas a independizarse les guste o no a los demás. El cortijo es de los que son más numerosos. Pero ¿quién ha inventado semejante absurdo?¿quién ha inventado semejante atrocidad?

Parece ser, que ven muy adecuado que una pequeña o gran diferencia les dé el derecho a obligar a los que no comulgan con sus tesis o sinrazones. Se tiene que hacer por las buenas o por las malas. Por las buenas no puede hacerse.

Por las malas, ese delirio independentista puede salir muy caro para todos, de manera que después no cabe decir “yo pasaba por allí” “aquí la puse” y otras majaderías semejantes; y esto cuando la paz y la cooperación se haya ido por el arrollo de la arrogancia y la locura.

No tengo inconveniente en vivir, como lo hago, en el Reino de Granada si vamos a volver a las sangrientas orgías fronterizas. Por lo mismo, los musulmanes tendrían derecho a “Al Andalus”, que ya detentaron en siglos anteriores. Y ya más lejos a Roma, pues tuvo muchos siglos el dominio de Hispania contra los cartagineses y otros. Y eso comprende a Cataluña, chiquillos locos.

¿Pero que puñeta es esto? ¿Qué demonios son los que entran a producir la desbandada que nadie permitiría, aunque en ello hubiera que emplear la fuerza? Como decía un cabreado hace poco: “lo que hay que hacer es darles la independencia y después invadirlos”. “Y ya que la cosa está mala, pues después de de perdíos, al río”.

Ni lo uno, ni lo otro; es vergonzoso que después de dos o más terribles guerras en las que produjeron apocalípticas hecatombes, no hayamos aprendido el valor de la paz y la unidad. ¿Es que es necesario imponerlas a base de dictadura? ¿Es que no sabemos disfrutar la libertad? Dejan a los musulmanes, y rechazan a los sudamericanos que hablan español. El caballo de Troya. ¡Imbéciles! ¿O creéis que los vais a domeñar? ¿Quien a Quien?

La primavera árabe, no ha valido la pena. Si se trataba  de cambiar de amo lo han logrado. Si de traficar con armas también.  Ahora mandan otros y de los muertos y los destrozos ¿quién me hablará? Diremos ¿Cómo se puede ser tan cruel, los unos y los otros? No nos acordamos de la guerra civil. Se quisieron imponer muchas tonterías y los otros no se consintieron.

Solo los allegados a los muertos, lisiados, casas destruidas (aquí damos importancia a los desahucios) ¿que será cuando les destrocen sus casas y sus pertenencias?  Solo hay un diagnóstico para lo que nos ocurre ¡somos idiotas!

sábado, 10 de noviembre de 2012

ESTE ES EL TINGLADO DE LA ANTIGUA FARSA


 



Bueno, pues como ya pronostiqué se habla ya de cañones y guerra. Cataluña, propiedad del presidente Mas y otros satélites, se subleva de grado o de fuerza. Ya tenemos la alternativa, de secesión o de guerra. Y como siempre, tengo “boca de cabra” y van saliendo mis modestas conclusiones.

Que ya faltan pocos días para la decisión final, en el sentido de que las cosas ya se precipitan y hay que tomar decisiones que pueden tener unas repercusiones terribles. En estos casos siempre hay enfrentamientos que producirán como en las manifestaciones algún “coco roto” o peor aun algún muerto, al que todos querrán sacar provecho para sus intereses.

Aquí cabe el poemilla de Machado en el que decía el buen poeta: Conversación de gitanos: ¿Cómo vamos, compadrito? Dando vueltas al atajo. Así son las cosas. O así nos las presentan.

Los catalanes están bien, capitanean España, son admirados y envidiados por muchos que desearían su prosperidad. De pronto, o es que ya se precipitan los acontecimientos, nos encontramos con que seguimos con las votaciones y las estrategias de partido. El politiqueo.

Es como si en Verdún o en el Ebro se hubieran enredado en Limoges, Madrid, Berlín o en Burgos en discusiones, cuando estaban en los momentos álgidos de las correspondientes batallas cruciales para la supervivencia de aquellas naciones o beligerantes. 

Todo ello, como si las acciones de unos y otros no tuvieran repercusiones en el mundo real, distintas de las que ellos (los políticos) viven en su mundo virtual, que consiste solo en desacreditarse unos a otros.

Es lamentable, que en lugar de unirse en asuntos de importancia y en beneficio de los ciudadanos, se enzarcen en discusiones bizantinas, se vulnere a ley por activa o por pasiva, se haga dejación de obligaciones y de responsabilidades, de tal modo que se llegue a robar ¡de una comisaría! droga en cantidades de alijo.

Seria cosa de risa, si no estuviésemos inmersos en un maremagno de barbaridades y despropósitos, como nunca he visto en mis ya largos años de vida. Antes se obligaba al orden, mientras que ahora se obliga al desorden bien por acción o por omisión. ¿Con Franco? Muchísimo mejor. Por lo menos para mí. Sin meterme a redentor, vivía en mi trabajo y en mis asuntos y a nadie he temido nunca. A mí no me da ninguna vergüenza decir lo que siento.

Acabaremos de mala manera y después nos echaremos la culpa unos a otros, pero los perjuicios ya se habrán producido. Y si por ahora solo son unos pocos copos de nieve ¿Qué será en la Sierra? Quiero decir que esto explotará y quizás echemos de menos lo que ahora tenemos. Sea lo que Dios quiera, para hacernos conocer lo bien que vivimos los españoles

Aunque yo no me distinga precisamente por el dinero, la paz y la alegría se pueden perder, mala cosa es terminar con un pucherazo o cosa similar y, adiós a la paz y al orden libre que tengamos ahora, y que tan de forma insensata despreciamos. Yo viví los bombardeos, y no me parece deseable que otra vez tenga que verlos.

Cabe la frase del que disconforme con esta “feria de las vanidades” y tal cúmulo de farsantes, que diría D. Pio Baroja.  Y D. Jacinto Benavente escribió en su obra "Los intereses creados", obra que le valió el Nobel de literatura. Este es el tinglado de la antigua farsa. Y lo es. Una farsa que olvida que las farsas a veces terminan a palos de unos contra otros, o como en la discoteca de Madrid donde no había ni orden ni paz.

 Hemos despreciado a Dios, y mucha gente no ha visto, ni siquiera ha oído, hablar de las sevicias que la guerra y las enemistades traen a los humanos que han despreciado la ley de Dios, cuando ella es la que puede dirigir el camino de hombres, mujeres y naciones.