miércoles, 18 de enero de 2012

LOQUITOS DE CONTENTOS




Me dan escalofríos, ver como en las primarias socialistas para elegir (ya está decidido) presidente o mandamás del partido; los componentes ríen gozosos, por lo visto, de lo bien que han dejado a España. Miles de empresas que cierran aun, y más que esperamos porque es difícil sacar un barco que ha embarrancado. Y España está bien embarrancada.

La multitud de sufrimientos y ruinas, que han provocado por una política terriblemente irresponsable, es para ellos algo normal que pasa en política. Cuando se hagan burradas, dicen los principales sospechosos, que se hagan las aclaraciones en las Cortes.

Me parece muy bien que estén tan contentos todos, en medio de su inopia y su absoluta falta de responsabilidad. Las cosas que estamos viendo me hacen darme cuenta de lo que es la opresión fascista que se hace desde los altas instancias.

Algunos me dirán ¿Cómo dice usted fascista a un socialista? En lo que yo he podido ver, en España son las dos opciones más similares y esto está demostrado todos los días, en los países en los que el gobierno (elegido o no) es comunista o socialista. Tanto el socialismo aplicado rigurosamente cuando puede, como el fascismo son deplorablemente nefastos.

Su carácter totalitario, y el concepto de que el poder les pertenece a ellos porque son los representantes del Pueblo, es claramente inmovilista, fascista, totalitario, y más aun, opresor. Se puede gobernar un país con reformas que no hieran la sensibilidad de las naciones que, como repite el rey, tienen cada uno su idiosincrasia.

Pero tratar de, con la coartada de la revolución, se perpetren hagan toda clase de tropelías, pienso que si lo que espera al pueblo español en un socialismo anticuado, y sostenido por viejos rencorosos y jóvenes ignorantes de la vida y la historia, estamos listos.

Es una continuación de lo que hemos visto, más vale que volvamos a un régimen tribal, y dejar que España o lo que quede de ella se convierta en una reserva o protectorado.

Un socialismo tipo Pablo Castellano, acreditado y al que se puede apoyar porque la lógica y el derecho le guía, yo seré uno de los que le voten. Con este elemento sí vale la pena hacer pruebas sociales. Ahora inteligentemente, solo cabe la opción PP. Y conste que en esto como en tantas cosas soy un inveterado “izquierdoso”, o más bien heterodoxo.

¿De que se ríen?

jueves, 12 de enero de 2012

YO TAMBIÉN AMO A OBAMA


Ya tenemos a Obama; Dios lo dirija con éxito en su labor. Lo deseo de todo corazón. No obstante tal como Jeremías y los demás profetas, yo no veo en mi horizonte «profético», nada más que desventuras para el mundo.

Por ahora regirá el atractivo de la novedad, la expectación del «cambio» que no sabemos, -o quizás lo sabemos demasiado-, si será catastrófico. Lo veremos muy pronto. Esto solo son señales para que los verdaderos creyentes en otra esfera del vivir.

Para los demás son tonterías. “une plainte (querelle) allemande” decía Daladier antes de la hecatombe de la II guerra mundial. “Une querella alemana” ¡Menuda querella! que costó millones de vidas y destrozó Europa entera.


Espero de corazón equivocarme.


sábado, 7 de enero de 2012

LO SOCIAL NO ES EL SOCIALISMO.



 
Tanto se escribe sobre política, y sobre todo por la noticias que al parecer nos interesan tanto, mientras las cosas espirituales las dejamos de lado por parecernos que ya son pesadas, o porque abundan A.D.G. en la red. Yo alguna vez que otra escribo, pero no para reportar noticias y asuntos locales o epidérmicos, que a los dos días ya se han perdido.

Cuando escribo, no trato de ser inmortal como tanto otros que se les llama así, y están enterrados hace siglos, y algunos tal vez ni se sepa donde están. Mi objetivo es el de impartir ideas, para que cada uno se tome su racioncita de aburrimiento o provecho. Yo trato de hacerlo lo mejor que sé (que no es mucho), y lo demás lo dejo en las buenas manos de Dios.

Dicho esto, es lamentable y siempre lo ha sido, el estado de los que no siendo nada socialmente, por avatares de la fortuna se ven elevados a un puesto para el que no está preparado, pero en muchos, este caso se da.

El problema grueso de las naciones es el del liderazgo. Si no hay liderazgo, el pueblo anda ya por los más ramplones caminos de mediocridad y bajeza, por lo que los resultados no se pueden esperar buenos en ningún modo.

Se dice que el pueblo es sabio. El pueblo lo que puede ser es culto, y entonces sabe dirigirse a sí mismo, como se ha demostrado en algunos periodos de ausencia de gobierno en alguna nación de las que hablamos, y no ocurre nada importante, porque los mismos ciudadanos se comportan de forma normal, y por tanto nada hay  extraordinario en el ínterin de un gobierno a otro. La policía actúa como siempre, los juzgados como siempre y todo así.

A pesar de ser veterano, no dejo de sorprenderme por la marcha de las cosas. Están todos triunfantes porque le han sacado al PSOE 15 puntos y yo me pregunto ¿Qué pueblo es este, que solo le saca estas ventajas a quien ha arrasado con su incompetencia todo lo que había, y hacía de España más interesante y próspera.

A mí no me hubiera parecido mal que le hubieran sacado por lo menos cincuenta puntos, pero cuando veo esto me asombro. ¿Como es posible que en estas condiciones haya gente que vote así? Se les destituye, y que se organicen para hacer un partido moderno y adecuado a las necesidades de España.

¿Qué es eso del Valle de los Caídos, del acoso a la conferencia episcopal, la dificultades que se le ponen por delante a los curas, monjas y voluntarios, a pesar de estar dando de comer a mucha gente, etc.

Mientras no haya pueblo, no hay nada que hacer, y España con sus grandezas ha pasado también por la historia con vilezas y barbaridades, que no son del caso contar. Ya para que tocar los llamados nacionalismos, que no son tales, pero que nos pueden llevar a lo peor que se pueda esperar.

De momento prevalecen la inconsistencia y la maldad, porque no de otra forma se puede calificar la acción de un gobierno, (o diecisiete), que solo sabe hacer nepotismo, y arruinar un país tan pronto como lo capta con promesas y lisonjas. Y al final la palabra mágica  ¿Porqué?

domingo, 1 de enero de 2012

ESTA ES MI ESPAÑA



Es un lugar común que cuando surge repentinamente un tema sustancial los comentaristas se lancen sobre él y, como es su profesión, lo calientan y guisan al sabor de cada uno con su tendencia o clarividencia. Ahora Urdangarín, que es presa a tiro de escopeta. Y si de paso pringamos al rey, pues más morbo aun.

Se trata de vender periódicos, y como yo no cuestiono de cómo cada cual se busca la vida, no tengo gran interés en criticar. Los socialistas derrengados y desmoralizados, han resistido hasta el último cartucho, intentando dejar la cosa lo menos arrasada posible… ¡o cualquiera sabe! No ha podido ser ni mucho menos, y ahora se desgañitan, diciendo que si los recortes, que si los ajustes de cinturón, etc. Y aun se muestran prudentes.

Yo no tengo mucha experiencia en los asuntos políticos, pero es que hay cosas que son de cajón, y cuando un comentarista dice algo potable lo apruebo, y a veces hasta aporta matices que yo no conocía como lego que soy, pero que alteran en bastante medida las cosas de la economía.

Es tontería meter macroeconomía, ni microeconomía, en esta sartén ardiendo, y sin aceite para que no se queme. Lo que se debe hay que pagarlo o no pedirlo, para gastar la mayoría de las veces en porquerías. “guste o no guste” ¿les suena? Si llega la Cospedal a una autonomía ya de por sí pobre, y se encuentra un bodrio monumental, se ponga como se ponga, tiene menos oportunidades que un charco al sol. Y la van a criticar, como nadie se figura.

 Un gobierno responsable no se mete en la orgía económica, que suponía que éramos más ricos que Francia y Alemania, y que podíamos tirar hasta donde nos diera la gana, que para eso “paga el Estado”. Con estas formas de entender la gestión pública, propias de necios, no puede ir bien ni el dinero de todos, ni siquiera el puchero del más pobre hogar.

He tenido y sufrido un negocio, y sabía a cada instante lo que había de bueno o malo. Y eso hacen (que yo sepa) la mayoría de los comerciantes, industriales, y hasta las  amas de casa.  Mirar la cartilla es buena costumbre en las mujeres, que saben si puede o no, comprar al niño  los zapatitos que le hace ilusión.

Ahora ¡a ver quien restaura lo inmoderado! Es muy difícil meter otra vez la pasta de dientes, una vez que se haya pisado el tubo y aplastado. Pero no hay que preocuparse, porque esto se compone con las necesarias restricciones, se quiera o no (nadie ha inventado todavía, que un billete de cinco se convierta en uno de diez como por arte de birlibirloque).

No hay más camino que restringir (gracias PSOE), y después cuando se haya puesto la cosa en equilibrio, vendrán otra vez los socialistas a pescar en río amansado, con los esfuerzos enormes por parte de Gobierno y Pueblo. Y a recomenzar con la misma charada, y el mismo resultado.

Siento decirlo, pero sé por mis años, que esto no lo arregla nadie. Es nuestro fatal destino. Mientras huelgas, protestas, sentadas, que hasta ahora no se han hecho, o lo han efectuado a toque de tambor flojito. Ya veremos a tambor batiente. Una izquierda seria ¿Dónde?