jueves, 5 de abril de 2012

SOCIALISMO REAL

 


Tengo cientos de mensajes en los que se me aprueba, por lo que su opinión se la puede guardar en donde sepa usted que debe hacerlo. A ellos no le parece esperpéntico ni cosa parecida, y cuando empecé a enviar sabía que saldrían ignaros y prejuiciados que me darían la lata. ¿Qué se le va a hacer? De todo hay.

Los postulados socialistas, que son totalitarios por querer imponer sus tesis políticas deleznables, y adoctrinar por fuerza del poder a las gentes, no le parecen a usted nada mal. Nada que objetar, piensa así y yo no tengo nada que decirle. Allá usted.

Aborto, aventuras biológicas que ya verá usted como acaban, el marujeo y el pandilleo, para no dejar hablar a nadie y poder ellos decir lo que les parezca, eso si le parece bien. Libertad de opinión mientras hacen oposición y absoluto aherrojamiento cuando mandan.

En mis tiempo de niño y antes y después, hubo hambre y escasez, como la hubo tras la dos guerras mundiales y también antes. Observe usted y verá que la bandera de la cruz gamada Nazi lleva el fondo rojo. Es Nacionalsocialismo.- Nationalsozialistischepartei.

Cuando se llevaron el oro y lo reclamaron dijo Satalin que iban a ver el oro “cuando se vieran las orejas”. ¡Cariñoso y leal, que era el siniestro tipo! Socialismo real. El fascismo, con sus lacras, es semejante, pero otra cosa.

Y después de tanta destrucción, se pretende una reconciliación, y la vuelta a lo mismo. Yo estuve en el lado de los perdedores, pero lo menos que puedo hacer es ser objetivo.

Si nos ponemos a hacer la cuenta de lo que hicieron unos y otros (cristianos o paganos), no terminamos nunca. En lo de ETA, una cosa es decir que sí hay arreglo y que se entregan las armas, y otra que se negocie de ocultas y para más INRI diciendo que no, y dando rango de interlocutor como si fuera un beligerante militar.

En cuanto a lo de la Iglesia Católica, lo conozco mejor que usted, y sé de qué va, porque estoy muy bien informado. Y soy católico, y soy protestante, y soy budista, y soy musulmán, en lo que cada una de estas denominaciones (hay millares), pueden tener de bueno.

Y me gusta el socialismo, beligerante por la causa de la libertad de cada uno. No la parodia de socialismo que padecemos trincón, irresponsable, y divisor de España. Por tanto me eximo de mencionar a nadie, porque hasta en película lo han sacado.

Lo que haga el Vaticano me incumbe lo mismo que a usted, pero como otros lechuzos, usted da por sentado un montón de cosas que, claro está, son fruto de prejuicios y de mala voluntad. Ya son consignas y caminos trillados. No son originales.
Y así amigo mío, termino mi sermón de hoy diciendo ¡Viva la libertad de expresión!

Y no el grito de los liberales antiguos de ¡“Viva la libertad, y muera el que no piense como yo”!

Bueno, así se escribe la historia.

Viva España, Una, Grande, y Libre, lo diga quien lo diga.

Cada ser humano tiene sus motivos. Guárdese los suyos. Siga escribiendo lo que le pete, que otro tanto haré yo donde me dejen.

Un saludo

Rafael.

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